Cantero: “La vida te da revancha”

Redacción y producción: Yanina Santos

El Mundial de Turquía ya pasó, pero para el base entrerriano el sueño terminó antes de empezar. La lesión que lo dejó afuera del torneo es una herida que todavía no cicatrizó. Sin embargo, su carrera sigue y la Liga Nacional también, por eso se prepara de la mejor manera para defender la camiseta de Libertad de Sunchales.

El entrerriano tiene 28 años.



“Quiero jugar en la Selección”. Cuando Juan Pablo Cantero volvió del viejo continente, luego de dos temporadas en la liga Due de Italia, le confesó a su padre su deseo. Gracias a su desempeño en el básquet nacional jugando para Sionista de Paraná – elegido en el quinteto ideal de la liga en 2009-,  y su importante trabajo para lograr el subcampeonato de Atenas de Córdoba este año, Cantero consiguió lograr aquel sueño que le había expresado a su padre: vestir la celeste y blanca. Pero un fatídico desgarro en el isquiotibial izquierdo le cortó la ilusión de jugar el mundial.

-¿Qué sensación tuviste tras el pinchazo en el isquiotibial?

-¿Sensaciones? Las peores. Sabía que me había pasado algo grave, quizás no me di cuenta en ese momento de que quedaba afuera, con tan solo imaginar en todo lo que trabaje estos años para llegar al mundial, y por una lesión perder lo que más quería.

-¿Sentías que llegabas al Mundial?

-Físicamente me sentía como nunca. Fuerte, liviano, rápido y, lo más importante, que mentalmente estaba en un nivel quizás nunca alcanzado en mi carrera. Sentía que podía hacer un papel muy importante dentro del equipo, siempre para lo que me necesitara el técnico.

“El jugador argentino es distinto, juega como sea y contra quien sea. Bien, lesionado o en una pierna”.

-¿Qué relación tenés con el “Oveja”?

-Diez puntos. Siempre me ha tratado muy bien, y fue directo en todo momento. Eso lo valoro muchísimo.

-¿Qué hiciste luego de quedar afuera del Mundial?

-Principalmente descansar la mente. Por primera vez en mi vida, sentí que había tocado fondo, que tanto esfuerzo y sacrificio no tenían sentido. Pero después de unos días de pensar y estar fuera de la cotidianeidad, me puse nuevos objetivos. Creo que todo te da revancha, y yo me siento preparado para seguir mejorando.

-Tuviste la oportunidad de compartir cancha con grandes jugadores ¿qué te dejó la compañía de ellos?

-Muchas cosas. Lo principal, es que dejan de lado sus logros, sus niveles de competencia, sus status sociales, y muchas cosas más, para volcar todo a un grupo, que bien saben todos que es la única manera de crecer a día. Te hacen sentir que sos uno más, al igual que ellos.

-Si bien Philadelphia se basó en una cláusula legal, ¿Qué opinás sobre lo sucedido con Andrés Nocioni?

-No lo entiendo todavía. Ellos manejan las lesiones con otro tiempo. El ejemplo más directo se ve en la NBA, cuando  los jugadores tienen lesiones súper pequeñas, y se van corriendo a los vestuarios, y quizás no entran más. Pienso que no entienden todavía que es un Mundial.

-¿Se te hizo difícil ver el mundial? ¿Cómo viste el desempeño del equipo tras la obtención de un quinto puesto?

-Pensé que no lo iba a poder ver, pero de a  poco me pudieron las ganas de prender la tele, y engancharme con mis compañeros. Jugaron bárbaro, y sabían que tenían muchas limitaciones, que quizás antes no las tenía, pero con esfuerzo lograron que esto no se notara. Es un gran grupo.

-Hablando un poco sobre la Liga Nacional, en la campaña con Atenas se vio un cambio en vos con la llegada de Oscar Sánchez. ¿Qué relación tenés con él?

-La relación es excelente. El día que llegó me dijo que quería que terminara como titular, que tenía que crecer dentro del equipo, y creo que así fue. Fue un gran entrenador dentro de los que tuve en mi carrera hasta ahora.

-Tras el proceso de rehabilitación de tu desgarro ¿Ya te sentís preparado para volver a las canchas?

-Sí, tengo muchas ganas. Me siento otra vez con ganas de jugar. Fue todo duro ésto, pero es lo que elegí yo, y lo que disfruto más en la vida.